martes, 1 de agosto de 2017

Día 10. ¿Va a comprar?... para bajarle.

ADVERTENCIA: Siempre he pensado que generalizar es una estupidez (hablando de estigmatizar a grupos por uno que otro mal patriota), así que léase mi post con mente abierta, sin malinterpretar mis palabras. Mi redacción es clara, va a unos pocos, no al grupo. 

Debo confesar que el nacionalismo es básico en mi -y no necesito ponerme la camiseta de la selección para probarlo-, sin embargo, hay cosas específicas de nuestra "cultura" que tambien debo confesar que detesto, por ejemplo: la impuntualidad (lo cual por cierto es un irrespeto terrible al otro, pero, bueno eso es tema potencial de otro post); el tema central acá es aquello que ahora he notado que me hace cambiar radicalmente mi buena onda, y se trata de todos aquellos imbecilitos que no tienen el mínimo sentido común requerido para realizar una transacción comercial y/o entrega de servicios, especificamente me refiero a labores en las cuales se trata directamente con clientes, por ejemplo: vendedores, meseros, cajeras, recepcionistas, etc. quienes por concepto deberían ser Jesús en persona, ya que son la cara directa de una empresa, marca, negocio, etc., pero, ¡es increíble lo que he visto en este pais!, pues solo aquí hay vendedores, meseros, cajeras, recepcionistas, etc. con tan pero tan poco sentido común, que se dan el lujo de tratar como basura a los clientes, quienes, por si no nos hemos dado cuenta son los que vienen a dejar plata para que tu jefe te pueda  pagar el sueldo con el que tú y tu familia comen, ¿es tan dificil de entender eso?...osea, creo que no hace falta un PHD para saber que están recibiendo un sueldo para hacer su trabajo, ¡tampoco se les pide sonreir gratis!; de ahí mi duda, ¿es tan dificil ser corteces en nuestro trabajo?, ¿es tan dificil dar un poquito más allá de lo que me dice el manual del puesto?, ¿se nos va a caer el hocico por decir palabras como "gracias", "un gusto atenderle", "le puedo ayudar en algo más", etc.?, ¡definitivamente no!, de hecho, cosas tan simples como esas hacen la diferencia; los gringuitos por ejemplo  son excelentes vendedores, pues no puedo olvidar que cuando estuve hace algún tiempo en Portland, visité  la tienda MAC, (donde por cierto no compré ni un alfiler) sin embargo el gringuito vendedor que pasó una hora mostrándome productos, cuando me fui me dijo algo que me dejó helado "Fue un gusto atenderle, ahora usted ya conoce la potencialidad de nuestro producto, y estamos anciosos porque usted regrese nuevamente a visitar nuestra tienda. Muchas gracias por su tiempo y tenga un buen día.", ¡casi me fui para atrás!, pues aquí la historia habría sido diferente, dado que si al vendedor le tenía una hora hablándome de sus productos y no le compraba nada...¡uf, mínimo me pegaba!. Pero bueno, ésto me hizo entender el porqué otros países están en la cima y otros revolcándose en el tercemundismo...¡Todo es actitud!, ¡La estupidez no puede ser cultural!... y fue en este momento cuando a mi cabeza vino la tan conocida pero tan pobre frase:  ¿Va a comprar?... para bajarle... la cual espero y algún día sólo sea parte de la historia nuestra.




No hay comentarios:

Publicar un comentario